Representantes
de la empresa expusieron argumentos en accidentada sesión que abandonó regidor
Jacobo Avalos
Preocupante es la situación
de la Municipalidad Provincial de Huaura, ante la deuda de más de ocho millones
de soles que mantiene con la empresa TEC Corporation.
Representantes de la misma
acudieron ante el pleno del consejo, tras ser invitados para rendir un informe
oral sobre estado real de la deuda que se ha incrementado a lo largo de los
años.
La exposición comenzó de
forma accidentada, tras aprobarse por mayoría la misma, luego que el regidor
Jacobo Avalos Dongo, optara por dejar la sesión al considerar impropio que la
empresa hiciera uso de la palabra, al no estar presente el abogado que llevó la
defensa años atrás.
“Debe haber un orden, si
estamos buscando que defender, nosotros debemos de instruirnos primero para
hacer las preguntas precisas y absolver nuestras inquietudes” dijo.
Manuel Rivarola, gerente
general de la empresa, fue el encargado de realizar la exposición donde sostuvo
que la deuda es de 8’418,963.71 soles que la municipalidad mantiene con su
representada, por la colocación de semáforos.
La cual se inicia con el
incumplimiento del contrato original que la comuna estableció con TEC
Corporation en el 2001 durante la gestión de Guillermo Agüero al realizar
cobranzas indebidas las cuales pese a reconocer en una posterior adenda, se
siguieron realizando.
Por lo que en el 2003 se
solicitó un arbitraje ante los incumplimientos de la municipalidad, lo que según
la empresa, originó daños y perjuicios por 5’889,307.05.
“Hemos propuesto anular
intereses, reducirlos, hemos propuesto un montón de mecanismos, pero no hay
voluntad” indicó, Rivarola, sobre lo actuado ante gestiones anteriores.
Por lo que el fantasma de
los embargos a la cuentas de la municipalidad sigue latente “ese es un extremo
al que no quisiéramos llegar, aunque lo hemos hecho en su momento” dijo.
La actitud de los ex
alcaldes provinciales contribuyó a las hostilidades y al incremento de una deuda
que resulta insalvable y perjudicial para la comuna provincial.
Ante ello el alcalde
Santiago Cano, demandó primero la unidad del pleno del concejo para afrontar la
situación.
“Dependo de un pleno del concejo,
la decisión la toma el pleno del concejo, pero en este caso he actuado de la
forma más transparente se tiene que escuchar las dos versiones para tener una
idea clara de lo que se tiene que hacer” finalizó.