Ácido se mostró el gerente
municipal, Juan Valencia, quien calificó de sicarios de la basura a los
responsables por la quema indiscriminada en el botadero de municipal.
Refiere
que lo ocurrido el último fin de semana es una situación que ha generado el
malestar de la ciudadanía, ante un acto que resulta prácticamente
incontrolable.
Son
más de 60 hectáreas que resultan difíciles de controlar por la amplitud de la
zona y lo abierto del lugar.
"Sólo
podemos calificar de sicarios y mafiosos a quienes realizan estos actos, por el
control de la basura y residuos sólidos" dijo el gerente.
La
solución está en el cierre del botadero que comparten los cinco distritos
costeros, una vez culminado el proyecto del relleno sanitario.
"Esto
depende del Ministerio del Ambiente para la construcción de este relleno
sanitario, la Municipalidad ya cumplió con todos los requisitos, pero el
ministerio aún no cumple" finalizó.
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