Bertha Romero, una de las afectadas, sostiene que el
muchacho la interceptó en los exteriores de su casa aduciendo que iba a rezarle
la morada, pues siempre ayudaba a las personas de la tercera en ESSALUD.
Confiada lo hizo pasar y juntos recorrieron cada centímetro
de la vivienda, al término de la “bendición” el sujeto pidió tomar un lonche
con los ancianos dándoles a cada uno un pan que los puso a dormir.
Aunque no son conscientes de cuánto tiempo estuvieron
dormidos, al despertar nada les pareció extraño, siendo al día siguiente que se
dieron se dieron cuenta que fueron robados, al faltarle unos relojes y más de
300 soles producto de su pensión.
“Le dije que tenía un sencillito y me pidió para echarle
la bendición para que no se termine y haga más platita y yo confiada le enseñe
mi dinero” dijo.
“Con un vaso y una rosa nos engañó y nos robó, la verdad
que no hay derecho, dicen que a la
hermana de mi esposa también fue a verla llevándole una bolsa de picarones los
cuales le dieron a los perros, pues no lo dejaron entrar” puntualizó, Silvano
Romero, esposo de la afectado.
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