Una vez más el Consejo Regional
de Lima se encuentra en el ojo de la tormenta tras la denuncia pública por el
aparente uso irregular de las camionetas destinadas para esta institución.
Las observaciones
presentadas por el consejero, Marcial Palomino, dan cuenta de un aparente uso
personal de estas unidades por parte de sus colegas de Cajatamabo, Huaral y Huarochiri,
aduciendo que no habría presupuesto designado para choferes y combustible para
las mismas.
“Están recorriendo sus
distritos, sus provincias y habría que investigar para que lo hacen, si las 24
horas lo están usando, aparentemente” dijo.
Indicó que las
especificaciones sobre la distribución de las unidades y la administración de
los vehículos han sido solicitadas hace quince días al consejero delegado,
Anselmo Ventocilla, para que se explique la productividad conseguida con la adquisición
de estas.
“Hay que fiscalizarnos a nosotros
mismos, porque es dinero e inversión del
presupuesto nacional, guste o no a los colegas consejeros” puntualizó.
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