(ECOS) Al
mejor estilo del boxeador Mike Tyson; en el distrito de Carquín, provincia de
Huaura, una bronca entre dos sujetos terminó de manera singular, dramática,
pero sobretodo muy dolorosa ya que después de los golpes que se dieron, uno
decidió literalmente defenferse con los dientes y le arrancó la oreja de un
mordisco a su rival.
La
víctima es un taxista de 41 años de edad llamado Tito Fernándo Ayarza
Arevalo, quien señala haber sido agredido por el sujeto de nombre Eduardo
López Cavero, conocido con el apelativo de ‘Talo’; «Yo me encontraba con un
amigo libando licor en el bar Satélite, en la loza deportiva de Carquín, cuando
el sujeto Talo me provocó, me mentaba la madre a cada rato hasta que nos
agarramos a golpes, él estaba con otra persona; en el momento que yo le cogí de
la cintura y le aprisioné, sentí un dolor en la oreja, pense que me había
mordido y nada más, pero jamás imaginé que en ese momento me arrancó la oreja»,
dijo el taxista, quien a esa hora se encontraba sedado por el alcohol.
«Con
el rostro ensangrentado me fui a mi casa y me dormí en el mueble, recién en la
madrugada me percaté que me habían arrancado una oreja; me levanté y cuando voy
al baño me mire al espejo y veo que me faltaba una oreja», señaló Ayarza
Arévalo.
El
taxista refiere que cuando se dio cuenta que le faltaba una oreja se fue con su
esposa al lugar donde se registró la pelea, para buscar el pedazo de su oreja y
llevarlo al hospital para que lo puedan coser, sin embargo no lo pudo
encontrar; al parecer, algún perro vago se lo comió.
PIDE
REPARACIÓN
«Lo
más lamentable es que el agresor no quiere reconocer su falta, hasta ahora no
le ha pasado un sol a mi esposo para su curación, nosotros tenemos tres hijos,
el trabaja como taxista pero ahora está en cama y no labora; yo vendo pescado
en el mercado pero tampoco puedo trabajar por que tengo que curar las heridas
de mi esposo», dijo por su parte la señora Luci Ramirez Bazalar, esposa del
herido, quien clama justicia ante las autoridades.
CARQUIN
INSEGURO
Vecinos
del distrito pesquero han señalado que muchos bares y cantinas existentes en el
lugar trabajan sin ningún tipo de control, «venden licor hasta de amanecida,
incluso a menores de edad, lamentablemente la autoridad brilla por su
ausencia», dijeron.
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