Huacho
es una ciudad considerada de brujos, curanderos, que trabajan con la magia
negra, espiritismo, la macumba, el vudú y otros que suelen practicar los
llamados brujos o curanderos muy conocidos en esta zona del norte chico.
Es
así que fuimos en busca de un curandero para conocer más allá de las historias,
cuentos y creencias de los brujos huachanos de la ubérrima campiña y
conversamos con el Curandero Mayor de Huacho, Manuel Acosta, aquí su relato.
“El
curanderismo es un don que dominamos y podemos desarrollar la magia negra,
espiritismo, con conocimientos de grandes ancestros brujos milenarios que tuvo
Huacho como son: José Yancunta y Ruperto Mori y otros que los siguen” nos
cuenta Don Manuel.
La
charla se pone interesante cuando nos explica que Huacho es tierra privilegiada
por las cargas magnéticas positivas que encuentras en cada rincón o terreno
baldío donde aún es virgen y sirven estas como campos de concentración y pueden
realizar sus trabajos.
“Aquí
–Huacho- tiene mucha energía magnética. Están descubriendo campos donde
se concentran energías y nosotros sabemos que ahí podemos hacer nuestros
trabajos como mesadas, rituales, espiritismo entre otros” relata.
No
obstante nos señala que Huacho no pierde esa identidad de llamada “tierra de
brujos y curanderos” y que muchos peruanos creen que nuestra ciudad es una tierra
de grandes y reconocidos brujos que hacen el bien y el mal.
“El
mal existe, pero nunca podrá con el bien. Porque el bien siempre triunfa,
porque existe un Dios que todo lo puede. Llegan muchos casos de personas que se
sienten débiles, sin ganas de vivir, pero cuando los curo, vuelve el espíritu
de vida en ellos” manifestó.
Sobre
el hallazgo de una muñeca vudú incrustada con alfileres y al lado la fotografía
de una mujer, reflejaban que un “brujo malo” está trabajando con magia negra y
lo que busca es hacer el mal o daño a determinada fémina.
“Ese
es el mal, el daño que hacen a esa persona. Nosotros primero averiguamos que
tiene cada uno y luego le sacamos el mal (curamos). Es todo un proceso con
espiritismo y otros trabajos, señala
el curandero Manuel.
Refiere
que mucho de los casos ocurridos de esta manera, los brujos malos suelen
enterrar su vudú en cementerios, campos de cultivos, huacas, cerros,
donde sea imposible encontrarlos, pero que solo pueden ser descubiertos por los
que hacen el curanderismo y se desata una batalla de poderes espiritistas.
“Es
la fuerza de la naturaleza, una lucha de poder sobrenatural. Ellos no quieren
dejar ir su presa, nosotros los recuperamos y lo volvemos al bien. Es por ello
que siempre hay esa clase de brujos con magia negra que hacen el mal” relata.
Una
entrevista muy interesante que permite conocer más allá de los cuentos,
historias de la existencia del curanderismo y la brujería en nuestra ciudad.
Manuel Acosta luego de conceder esta entrevista, atiende a las decenas de
personas que esperan en la puerta de su casa y nos deja este mensaje “Que las
fuerzas magnéticas de Huacho te guíen por el buen camino y pedir a Dios que te
guie en tu caminar”