Gracias a un conejo la policía pudo
descubrir sembríos de marihuana en una vivienda de San Bartolomé.
El hecho se registró cuando la dueña del
animal se percató que este se había pasado a la vivienda contigua la cual está
divida mediante esteras.
Al intentar
recuperarlo pudo divisar que el animal parecía
comer de una planta extraña por lo que se dio aviso a la policía la cual
procedió al incautamiento de la misma.
Sujetos inescrupulosos habrían sembrado
las plantas aprovechando que el inmueble de adobe se encuentra abandonado. Se
apreció plantas de 30 cm aproximadamente, se encontraban en una tina que era
utilizada como macetero, mientras que otra cantidad
similar se halló en un balde.
Se presume que jóvenes que pululan por el
lugar habrían realizado la siembra del alucinógeno.
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