Dos
jovenzuelos fueron atrapados por agentes del serenazgo, en una persecución
emprendida por inmediaciones de la playa Chorrillos, cuando habían asaltado a
un transeúnte.
Gracias a un despliegue inmediato de los hombres de azul, se logró interceptar la mototaxi de color amarilla, de placa de rodaje Nº B4 – 8470, con número de registro 2957; la cual huía por las calles Gálvez, San Román, Torres Paz y Dos de Mayo.
Una vez cercada la unidad, se obligó a sus ocupantes a descender y entregar todo lo robado; al mostrar una resistencia por los elementos de mal vivir se esperó la llegada de la fuerza del orden, consiguiéndose reducirlos y llevarlos a la comisaría de Salaverry.
En tanto los presuntos malhechores fueron identificados como Diego Beltrán Ramírez, chofer de la mototaxi y Diego Díaz Jorgues, quien se encargaría de atacar a sus víctimas.
En el interior del vehículo menor se encontró toda la pertenencia arrebatada a su víctima Javier Ochoa Torres (19), que consistió en un celular, una Tablet y dinero en efectivo ascendente a 2 mil nuevos soles aproximadamente.
Por su parte, el joven asaltado identificó plenamente a sus atacantes y la unidad que utilizaban para delinquir.
Gracias a un despliegue inmediato de los hombres de azul, se logró interceptar la mototaxi de color amarilla, de placa de rodaje Nº B4 – 8470, con número de registro 2957; la cual huía por las calles Gálvez, San Román, Torres Paz y Dos de Mayo.
Una vez cercada la unidad, se obligó a sus ocupantes a descender y entregar todo lo robado; al mostrar una resistencia por los elementos de mal vivir se esperó la llegada de la fuerza del orden, consiguiéndose reducirlos y llevarlos a la comisaría de Salaverry.
En tanto los presuntos malhechores fueron identificados como Diego Beltrán Ramírez, chofer de la mototaxi y Diego Díaz Jorgues, quien se encargaría de atacar a sus víctimas.
En el interior del vehículo menor se encontró toda la pertenencia arrebatada a su víctima Javier Ochoa Torres (19), que consistió en un celular, una Tablet y dinero en efectivo ascendente a 2 mil nuevos soles aproximadamente.
Por su parte, el joven asaltado identificó plenamente a sus atacantes y la unidad que utilizaban para delinquir.
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