Sus
casi 100 kilos no era impedimento para movilizarse para vender sus
estupefacientes a jóvenes y mujeres que lo adquirían a vista y paciencia del
vecindario en Carquin.
Los
agentes antidrogas disfrazados de chatarreros le seguían los pasos hasta el día
de ayer que simularon comprar “los caramelitos” y la atraparon con los ketes en
las manos.
Teodora
Caldas “Gorda Yola” fue intervenida hasta por 3 agentes que la neutralizaron,
pero su gordura se dio maña para zafarse de las grilletas siendo oportuna la
participación de más agentes antinarcóticos.
“Se
encontró ketes en su poder y aceptó que se dedica a la micro comercialización
de estupefacientes” dijo la policía.
La
mujer voluminosa permanecerá en la carceleta por 15 días mientras dure las
investigaciones del caso.
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