Como jalado de los cabellos
calificó el regidor provincial, Arturo Uribe Torres, el pedido de adquisición
de las canastas navideñas para los trabajadores de la comuna por
desabastecimiento inminente.
La solicitud generó las
críticas por parte de los concejales, pues el concepto, pretendía exonerar del
proceso de licitación la compra de las cerca de 700 canastas.
Para Uribe Torres, esta es
una situación totalmente previsible que los funcionarios debieron tomar en
cuenta y planificar con anterioridad el requerimiento, como forme al marco
normativo previsto para estos casos.
“No van a esperar estar a escasos
días de celebrar la navidad y declarar como si fuese una emergencia para
exonerar del proceso de licitación” explicó.
El pedido fue debatido y
discutido a nivel del pleno del consejo, desestimando el mismo por unanimidad.
Sin embargo para el concejal
el haber aceptado la exoneración habría acarreado graves consecuencias para el
alcalde y regidores, por cuanto las razones de la misma no justificaban lo
solicitado.
“Ahora va a tener que licitarse de forma normal y quizá
a los trabajadores van a tener que darles a la quincena o fines de enero”
remarcó.
“No podíamos haber aprobado
una exoneración de este tipo, lamentablemente los más perjudicados van a ser
los funcionarios municipales, los trabajadores que hubieses querido llevar una
canasta por navidad a sus casas” finalizó.
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