Calificó el discurso de
Javier Alvarado como sarcástico, donde se hacían ciertas críticas a la gestión
pasada, lo que consideró como una falta de respeto.
Refiere que esta fue una de
las razones por la que en un primer momento prefirió no hacer uso de la palabra,
aunque tuvo que ejercer control sobre sí mismo para no caer en un acto de confrontación
durante el evento.
“Traté de ser cauto, pero me
incomodó su conducta sarcástica, cuando invitas a alguien a un evento que estas
realizando, tienes que tratarlo bien, no puedes actuar de esa manera” enfatizó.
“Por eso es que esta es la
última, ya estoy curado, ya no voy a asistir a una invitación porque no quiero
exponerme” acotó.
Sostuvo que si bien esto no
lo afecta políticamente, por cuanto estuvo presente la buena intención a favor
de la colectividad el error puede ser interpretado “como un pecado venial que
cualquiera puede cometer.”
Reconoce que el hecho ha generado
las críticas por parte de algunos aliados de la actual gestión, sin embargo
considera que el haber sido padrino en la entrega de ambulancias de ninguna
forma representa un acercamiento con Javier Alvarado.
“No tengo una alianza con él,
voy a seguir criticándolo como lo he hecho hasta ahora y sigo criticando su
gestión porque me parece que está mal y vemos que hay muchos vicos de
corrupción” puntualizó.
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