Ante ello la directora, Ana Talavera, apeló la
resolución emitida por la municipalidad que afecta más de 300 metros cuadrados
de terreno de la institución.
Así lo indicó, Rubén Rojas, docente del
emblemático colegio, quien consideró que la situación debe ser revisada
minuciosamente por el alcalde Juan Carlos García Romero.
“Si voy a ceder un área como
un parte público; primero tengo que ver el saneamiento físico legal, en el
argot criollo, Santa María no se merece esos funcionarios” explicó.
Una situación que retrasa la
ejecución de la nueva infraestructura del plantel, donde se construirá una
piscina y dos lozas deportivas en la zona de conflicto.
Por ello esperan que esta
situación sea corregida lo antes posible, pues el conflicto con los vecinos
radica en el cierre de la salida a la panamericana, por lo que exigen ellos la
permanencia del pasaje.
“La experiencia en catastro
público demuestra que no todos los barrios tiene acceso directo a una cale
principal” acotó, el docente.
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