Por poco y no la cuenta. Esperanza Meza Domínguez (54) se llevó el susto de su vida cuando una enorme tabla que es usada en una construcción entre las intersecciones de las calles 28 de julio y Ausejo Salas, cayó desde lo alto de un cuarto piso.
El hecho se produjo mientras transitaba por el lugar y se detuvo a comprar en uno de los puestos ubicado cerca a un puesto de periódicos, cuando de forma inesperada se da cuenta del objeto que se le venía encima.
Sus buenos reflejos le permitieron reaccionar a tiempo, sin embargo el enorme objeto logró afectarle la pierna derecha quedando completamente hinchada.
“Me han dicho que esto ha sido casualidad pero pudo haber matado, salieron y ni me preguntaron como estoy de frente se llevaron el tablón” dijo.
“Si yo no corría me mataba, mis hijas me iban a encontrar muerta” acotó.
“Deben ser más responsables los albañiles, a cualquiera le pudio haber caído, si yo no hubiera corrido, me hubiera muerto, también hubieran dicho que es de casualidad” finalizó.
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